La crisis del coronavirus ha traído consigo numerosos cambios; algunos nos presentan escenarios disruptivos y otros han acelerado tendencias que ya venían “pegando fuerte” hace tiempo, como las oficinas híbridas y el “trabajo líquido”, impulsado por las nuevas tecnologías y la transformación digital.
Lo cierto es que cada vez hay más ‘trabajadores líquidos’, empleados que pueden trabajar desde cualquier momento y lugar, y con cualquier tipología de relación laboral.
La flexibilidad horaria, en estas complejas circunstancias que estamos viviendo, cobra mayor protagonismo que nunca. De hecho, según un estudio realizado por Adecco Group a 1000 empleados de diferentes países, el 80% piensa que es importante implementar una mayor flexibilidad respecto a cómo y dónde puede trabajar el personal.
La oficina no va a desaparecer. ¿Entonces qué pasa con esa apuesta generalizada por el trabajo remoto? La respuesta parece clara: El futuro del trabajo y de los espacios laborales es híbrido.
¿Qué son las oficinas híbridas?
¿Qué es una oficina híbrida? Como su nombre indica, en la oficina híbrida los empleados tienen la flexibilidad de trabajar desde la empresa o en cualquier otro lugar.
¿Sirve cualquier tipo de oficina? Indudablemente no. Las empresas, de hecho, están ya diseñando e implantando espacios bastante diferentes a los anteriores a la pandemia. Se plantean por ejemplo: “si el 50% de la plantilla no acude a la oficina, ¿para qué necesita cada empleado un puesto de trabajo asignado? La alternativa, hoy más que nunca, son los puestos no territoriales compartidos en los que cada espacio es de todos.
Por otro lado, si podemos trabajar desde cualquier lugar -la oficina “viaja” con nosotros- ¿para qué vamos a ir a la empresa? Para colaborar con otros, ni más ni menos. Nuestro ADN es social, en consecuencia, en las nuevas oficinas priman los espacios colaborativos frente a los de uso individual.
En esta nueva era de trabajo híbrido las oficinas en casa, por lo tanto, convivirán con espacios para el trabajo presencial, que mayormente son compartidos, porque aunque haya empresas que están ofreciendo a sus plantillas la posibilidad de trabajar 100% en remoto y a pesar de que el teletrabajo está demostrando ser de gran utilidad durante la pandemia, el trabajo en casa tiene muchas carencias que repercuten negativamente en la satisfacción de los empleados y en la productividad de las empresas.
La oficina es el punto de conexión de las plantillas y el alma de las empresas; es el lugar donde ocurren las cosas. Su función es hoy la socialización, y esto tiene claros beneficios en términos de motivación, comunicación, cooperación y bienestar de las personas. En este sentido, las oficinas representan un activo esencial para la productividad de las compañías.
El mejor mobiliario para teletrabajar
Y al igual que las empresas velan por la salud y seguridad de sus plantillas en sus centros laborales, contar con un espacio de trabajo en casa saludable y confortable es una necesidad acuciante para cada vez más personas.
Ese espacio donde trabajamos en casa debe cumplir con los mismos requisitos ergonómicos que nuestros puestos de trabajo habituales en la empresa. Por ello, el mobiliario debe estar diseñado para proporcionar una postura correcta durante la jornada laboral, facilitando el máximo confort y el bienestar de sus usuarios.
¿Cómo tienen que ser la silla y la mesa de oficina para teletrabajar?
Te lo contamos en este otro post.
